Primer Encuentro Regional de Mecanismos de Prevención de la Tortura en América Latina

El Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP) de Paraguay formó parte activa del Primer Encuentro Regional de Mecanismos Nacionales de Prevención de la Tortura de América Latina, organizado por la Red Latinoamericana de Mecanismos de Prevención de la Tortura (ReLaPreT), los días 23, 24 y 25 de julio en Santiago de Chile.

Este histórico encuentro, el primero de carácter presencial desde la conformación de la Red en 2024, reunió a representantes de mecanismos nacionales de más de diez países de la región con el objetivo de fortalecer el trabajo conjunto, intercambiar buenas prácticas y avanzar en la elaboración de recomendaciones dirigidas tanto a organismos nacionales como internacionales.

Participación del MNP Paraguay: avances, desafíos y compromiso regional
Durante la jornada inaugural, la comisionada nacional Claudia Sanabria representó al MNP de Paraguay en la sesión sobre la implementación del rol preventivo y organización de los mecanismos. En su intervención, destacó como fortalezas clave del organismo su autonomía institucional, su presupuesto propio y el mandato legal que le confiere independencia para incidir ante los órganos del Estado. Sanabria también compartió los principales desafíos del contexto paraguayo, marcado por profundas desigualdades sociales que impactan directamente en los derechos humanos de las personas privadas de libertad.

La comisionada Sonia Von Lepel participó el jueves 24 en la sesión temática sobre mujeres y personas LGBTI+ privadas de libertad. En su intervención —junto a representantes de Argentina y Chile— abordó los efectos del aislamiento prolongado en los módulos de máxima seguridad, advirtiendo que esta práctica tiene un impacto desproporcionado en mujeres, especialmente aquellas con problemas de salud mental, derivado del consumo problematico. Subrayó la urgencia de reformular estos regímenes penitenciarios para prevenir prácticas que pueden constituir formas de violencia institucional, recordando que el aislamiento por más de 15 días se considera Tortura, conforme a la postura del Subcomité para la Prevención de la Tortura de Naciones Unidas.

Finalmente, el viernes 25, la comisionada Claudia Sanabria volvió a tomar la palabra en la sesión dedicada a la protección de la niñez y adolescencia. Compartió la experiencia del MNP en el monitoreo de entidades residenciales educativas, particularmente en la región del Chaco, y remarcó la importancia de generar políticas públicas que garanticen el derecho de niños, niñas y adolescentes a vivir en familia y acceder a una educación de calidad. Sanabria presentó también la metodología participativa utilizada por el MNP para la escucha activa de niños y adolescentes en estos contextos.

Avances regionales y próximos pasos
El encuentro se llevó a cabo en las oficinas del Comité para la Prevención de la Tortura de Chile (CPT), con sesiones temáticas que abordaron también el rol de las fuerzas policiales, la salud mental en contextos de encierro y el monitoreo con enfoque de derechos. Entre las y los panelistas estuvieron representantes del Subcomité para la Prevención de la Tortura de la ONU, la Asociación para la Prevención de la Tortura (APT) y la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en América del Sur.

Como cierre del evento, los mecanismos presentes reafirmaron su compromiso con el fortalecimiento de la ReLaPreT y acordaron avanzar hacia una declaración conjunta y una agenda de trabajo regional coordinada, con énfasis en enfoques diferenciales y la sistematización de buenas prácticas.

Contexto
Actualmente, América Latina cuenta con 14 Mecanismos Nacionales y 19 Mecanismos Locales de Prevención de la Tortura, concentrados principalmente en Brasil y Argentina. Desde la creación de ReLaPreT en mayo de 2024, en el encuentro de San José (Costa Rica), los mecanismos han intensificado sus esfuerzos de articulación, con el apoyo de organizaciones internacionales de derechos humanos. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha respaldado públicamente la creación de la red y su impacto en la promoción de estándares regionales en la prevención de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes.